1. |
Otra vez aquí
05:54
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Hace mucho tiempo desde la primera vez que te ví
cantando mis temas sin saber que eran todos para tí.
Hace tanto tiempo que mis manos se han negado a tocar,
que en mi garganta hay telarañas que no dejan cantar.
No sé lo que buscas, esta noche yo te buscaba a tí.
Para lo que quieras los Fenómenos estamos aquí.
Deja tus problemas en la esquina de la calle de atrás,
vamos a hacer la reconquista de esta vieja ciudad.
Otra vez aquí,
contigo hasta sentir,
de nuestra soledad,
el último latir.
Antes de actuar en mi cabeza va a estallar un volcán.
Pero ya hace tiempo que te siento cuando salgo a tocar.
¿Sabes? es en eso en lo que pienso cuando empiezo a escribir,
es el motor que me levanta cuando vuelvo a subir
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2. |
La puta realidad
04:22
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Amanece en mi habitación,
junto al mudo despertador.
Lleva ya tiempo sin avisar
que te tienes que levantar.
No hay curro en ningún lugar,
hasta la gente te mira mal.
A mí la gente me da igual
porque he llegado a pasar
de estar currando como un cabrón
a estar parado como un STOP,
de madrugar por obligación
a no dormir de preocupación,
de estar cansado de trabajar
a estar cansado de esta situación,
de no tener imaginación
a escribir esta canción.
Así pasa un día más,
sin encontrar la salida.
No sé si algo hicimos mal
para que nos trate así la vida.
No sé cuánto habrá que aguantar
para que todo esté en su lugar.
Me da igual que me miren mal
porque he llegado a pasar
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3. |
...Y vuelta a empezar
05:03
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Se han apagado de golpe
todas las luces
a tu alrededor,
y te has chocado contra el muro
de la incertidumbre.
Y de repente pensar
que todo el disfrute
ha sido un error,
que casi nunca es oro
todo lo que reluce.
¿Dónde estás?:
en el fondo del pozo del llanto.
Yo, callado,
me deslizo en el pozo de al lado.
Y, sabiendo cómo encontrarnos,
no te llamo para no hacerte mal,
no contestas para no hacerme daño
y vuelta a empezar.
Cada segundo que pasa
es como el infierno
en el juicio final.
Cada segundo que resta
el comienzo del invierno
en el país donde nunca
llega la calma
tras la tempestad,
donde una capa de hielo
enturbia las miradas.
Como un náufrago en medio del mar,
la esperanza es un chiste macabro.
Todo lo que tenías se fue
de putas a otra ciudad.
Sólo te quedó llorar.
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4. |
Espinete punza
00:34
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5. |
Caricias de fuego
04:45
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Eres tú la causa
que me hizo llegar hasta aquí.
Sólo tú eres mi vida
y me debo a tí.
Yo creí que un Sol
jamás podría nacer.
Te busqué pensando
que eras realidad.
Caricias de fuego,
un sueño sin dueño.
Gritos de pasión,
ya no hay sitio
para la razón.
Me mostré sin armas
ni engaños hacia tí.
Sufriré
por una noche de amor.
Y olvidé tu pena
y tu gloria
y te dí mi alma
y mi cuerpo en un solo ser.
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6. |
El mundo a tus pies
04:45
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Cuéntame lo de siempre:
"vivir en libertad,
romper con el presente
y ver el mundo real,
no lo que ven los demás."
Sin saber cómo ha sido
que dejó de trotar
la raya de farlopa
que hoy galopa en el cristal,
desbocada y fugaz.
Ya no te acuerdas de cómo empezó,
cuando colgarse era sólo una opción
y controlabas bien la situación.
Tú, que tenías el mundo a tus pies,
cuéntame cómo es el cielo que ves
sólo y tirado en cualquier callejón.
Partir sin lo aprendido
y dejarse llevar.
Pensar por el camino
a dónde quieres llegar.
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7. |
Malamente
05:07
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Después de toda la semana
sin pisar el bar,
allí me estaba esperando
ese extraño lugar,
con música elegante
y cierta oscuridad.
Lo mejor de la semana
estaba en ese local,
la gente se divertía,
los camareros más.
En las paredes había
un poquito de humedad.
Era mi segundo hogar ¿por qué?
Nuestro refugio semanal.
Lo que querías podías tomar,
un servicio sensacional.
La música no estaba mal
porque no ponían al Bisbal.
Los colegas estaban allí:
el Richi, Juliete, Callejas, Rulín.
La cerveza tenía
un toque especial.
Los chupitos del garito
estaban antes que el bar.
Y de las puertas del fondo,
casi mejor no hablar.
Aquellos viernes era feliz,
y los que estábamos allí.
Nunca me olvidaré del bar
y de su ambiente especial.
Aunque en las paredes
seguía habiendo un poquito de humedad.
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8. |
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9. |
Un huevo kinder vacío
03:34
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El portazo me privó
de decirte, de una vez,
lo mucho que te quiero.
El pasillo se alargó,
y mi orgullo, otra vez,
a rastras por el suelo.
Me he puesto a pensar en lo que he sido:
un chiste malo del destino,
un cero a la izquierda, un suspiro,
una sala de espera sin ruido,
un huevo kinder vacío.
La tristeza vino a ver
cómo me iba a torturar,
qué iba a hacer conmigo:
en los baños, otra vez,
pintar tu nombre al final
de un "no te olvido".
Esta vez no.
Esta vez no voy a llorar por ella.
Esta vez no.
Esta vez no, como un perro tras sus huellas.
Esta vez no.
Esta vez no seré al atardecer
un girasol que se deje caer.
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10. |
No quiero ser como tú
05:08
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Un STOP en tu camino.
Ahora debes elegir,
ponte un calificativo
o no te dejo seguir.
De izquierdas o de derechas,
empresario o sindical,
o de ciencias o de letras,
de Israel o musulmán.
Y yo, harto de que me juzguen al ver
cómo me peino y me visto,
no voy a bailar mi vida entera al compás
de lo que dicten los listos.
Elijo ser como soy.
Quiero volar, dejar de pensar,
y encerrar al Mundo en el desván,
dejarme llevar por la brisa del mar
y dejar de ser como los demás.
O esto es blanco o esto es negro,
aquí ya no existe el gris.
O de playa o montañero,
o del Barça o del Madrid.
Y yo, que me deshuevo cuando veo arreglar
el Mundo a los tertulianos,
soy como un borrego que no entiende cuál es
el rebaño de los malos.
Elijo ser como soy.
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11. |
Músico callejero blues
05:14
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Maletín de cuero
repleto de sueños,
bufanda en el cuello,
en la cabeza un sombrero,
vestido de negro
con pinta de extranjero.
Sin dinero en el bolsillo
te invito a un estribillo,
con mi vieja guitarra
colgada en mi espalda.
Cuántas batallas
ha pasado ya...
En mi rincón de siempre
tocaré mi melodía.
Soy tu banda sonora,
en la calle a cualquier hora.
Si te quedas conmigo
te cantaré al oído.
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12. |
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13. |
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Eres tú la causa
que me hizo llegar hasta aquí.
Sólo tú eres mi vida
y me debo a tí.
Yo creí que un Sol
jamás podría nacer.
Te busqué pensando
que eras realidad.
Caricias de fuego,
un sueño sin dueño.
Gritos de pasión,
ya no hay sitio
para la razón.
Me mostré sin armas
ni engaños hacia tí.
Sufriré
por una noche de amor.
Y olvidé tu pena
y tu gloria
y te dí mi alma
y mi cuerpo en un solo ser.
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Fenomenos Paranormales Épila, Spain
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